Días atrás, la Demarcacion de Lanzarote organizó una visita guiada a los cultivos de la cochinilla, situados en las inmediaciones del Jardín de Cactus, en las localidades de Guatiza y Mala. Asimismo, se visitó el taller-tienda de la Artesanía de la Cochinilla, que gestiona la Asociación Cultural, Patrimonial y Agrícola La Milana. La visita fue guiada por Alejandro Perdomo Placeres, experto en botánica, erudito en historia local y Cachorro de Honor de la Orden en Lanzarote.
La cochinilla es un insecto, cuyo nombre científico es Dactylapius coccus costa, vulgarmente conocida como cochinilla y vive como parásito en las hojas de las tuneras, alimentándose de la savia de sus hojas. La cochinilla hembra es la materia prima para la fabricación del colorante rojo natural de más calidad y duración conocido hasta la fecha. Es un insecto originario de México. Con la llegada de los conquistadores castellanos comenzó un intenso intercambio de productos entre ambos continentes. La cochinilla fue la materia prima más importante de exportación desde el nuevo mundo después del oro y la plata.
La primera exportación de cochinilla a Europa (Cádiz) fue en 1523, apenas dos años después de consumada casi la conquista de México. El impacto del colorante natural den Europa fue enorme. En 1550 ya se había generalizado el uso de la cochinilla como colorante de primera clase. El carmín de la cochinilla se utilizaba fundamentalmente para teñir los ropajes de la nobleza y de los eclesiásticos. Con cochinilla se tiñeron también las chaquetas del ejército británico.
La introducción de la cochinilla en las Islas Canarias se sitúa en 1825. El éxito del cultivo es contundente, ya que se siembran miles de hectáreas de tuneras (nopal, chumbera) y el cultivo de la cochinilla se convierte en un monocultivo y en la base de la economía de Canarias. El período de esplendor de la cochinilla en Canarias es de 1835 a 1880.
En Lanzarote adquiere una gran expansión e importancia en las localidades de Guatiza y Mala. A mediados del siglo pasado, Lanzarote se convirtió en la primera exportadora de cochinilla a nivel mundial. Actualmente el cultivo de la cochinilla está bajo mínimos, es casi inexistente. Otros espacios geográficos lejanos (Perú, Chile, Bolivia…) han reemplazado a Lanzarote. La cochinilla es un tinte prodigioso que ha sido fundamental en el teñido natural de los tejidos y en la industria textil desde el siglo XV.
Fotos: Julián Martín